AÑO: 2012
TRAILER: http://www.youtube.com/watch?v=9RogHLfx-cg
FRASE: "Los niños no dicen mentiras"
Una
acusación de violación es de las más graves que se puede hacer contra una
persona, sobre todo cuando la víctima es un niño y el acusado una persona insospechada
dentro de la comunidad; hoy en día es una de las formas más fáciles de destruir
a una persona, ya que siempre quedará marcada.
Ese
es el tema de la nueva película de Thomas Vinterberg. Lucas es un maestro en un
preescolar de un pueblo en Dinamarca, es divorciado y vive solo pero es muy
apreciado dentro de la comunidad; hace parte de un grupo de caza al cual
pertenecen sus amigos de toda la vida y su hijo quiere vivir con él. La hija
menor de su mejor amigo asiste al preescolar, razón por la cual Lucas le presta
atención especial y son un poco cercanos. Sin embargo, la niña se “enamora” de
Lucas y le da un regalo especial; él le explica que es su maestro y que ese tipo de regalos se
lo debe dar a un niño del salón, ella se afecta profundamente y una noche le
dice a una maestra que Lucas se propaso con ella. A partir de allí la vida del
profesor se desmorona, se vuelve un paria para la comunidad.
La
premisa para condenar a Lucas es que los niños no dicen mentiras, mucho menos
mentiras tan graves. Por esta razón los maestros, los psicólogos y los padres
empiezan a reforzar una realidad alterna en la cual Lucas es un monstruo que ha
vivido escondido y ha victimizado a sus hijos; no importa si la niña hace
ocasionales y tímidos esfuerzos por desmentir lo que ha dicho, en la conciencia
colectiva Lucas es un abusador de menores.
La
actuación de Mads Mikkelsen es absolutamente impecable, transmite con
credibilidad la situación difícil de un buen hombre víctima de una mentira; se
puede ver su desesperación y la “inocencia” con la cual acepta su nueva
situación, incluso la resignación al darse cuenta que nunca dejará de ser un
presunto violador a pesar que se probó lo contrario. Así mismo, la niña que lo
acusa también desempeña un fantástico papel pues su actitud hacia la situación
más que de inocencia es de frialdad y desdén, pues aunque pareciera lamentar la
mentira, es algo que no la afecta en su vida.
Durante
toda la película uno espera que este hombre se desmorone y sea vencido, sin
embargo su conciencia limpia no lo deja; Lucas simplemente espera que lo dicho
(que además él no sabe que es) sea esclarecido y se demuestre que una niña de 5
años simplemente dijo una mentira. A pesar de que se demuestra la inocencia del
profesor y que los niños si pueden inventar historias, nadie está convencido, todos
dudan de la inocencia de Lucas a pesar de conocerlo de toda la vida y, además,
porque nadie piensa que sus propios hijos sean unos mentirosos.
Sin
embargo ¿quién podría pensar diferente?, es muy difícil no creerle a una
persona, sobre todo a un niño, una acusación así de grave ya que por muchos
años el abuso sexual ha sido un asunto que es mejor “dejar bajo la alfombra”
por una cuestión de vergüenza para la víctima y su familia.